Actualmente, existen varias investigaciones que avalan los beneficios de los videojuegos, mientras que por otro lado, también varios autores demuestran que pueden tener consecuencias negativas.
Los videojuegos entretienen y divierten y también estimulan la coordinación ocular y manual, promueve la atención, percepción visual y la memoria; a través de ellos se adquieren algunas estrategias, refuerzan el sentido del dominio y control personal, incluso pueden llegar a potencial la autoestima y facilita las relaciones sociales entre jugadores.
Por otro lado pueden llegarnos a la magnitud de quitarnos el tiempo dedicado a estudios u otras actividades más educativas. Algunos de los videojuegos pueden favorecer hacia una conducta impulsiva, agresiva y egoísta, se puede llegar a ser un adicto a juegos, por ende impedirán el desarrollo de actividades constructivas, algunas personas pueden hacer uso de juegos no adaptados, por su contenido o nivel de violencia, también se ha comprobado que tienden a producir fatiga ocular, cansancio y migrañas dependiendo del tiempo de uso.
Los videojuegos con medida son buenos ¡Claro que sí!
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